Vibrio Parahaemolyticus
La microbiología es una rama de la biología que estudia los microorganismos tanto patógenos como no patógenos, y como tal es de suma importancia para los seres humanos ya que pueden llegar a ser útiles en muchas otras ciencias, tales como en la ambiental, en la biotecnología, en la medicina, y por supuesto, en la gastronomía. Como profesionales en formación, es sumamente necesario conocer los pormenores del área microbiologica así como de la seguridad alimenticia ya que somos los encargados de prevenir en los comensales enfermedades intestinales provenientes de alimentos.
El género vibrio es de la familia vibrionaceae, la cual esta compuesta por mas de 35 especies (Debanch, 2009). El vibrio parahaemolyticus es un bacilo gram negativo (durante la tinción de Gram suele teñirse de rojo debido a que tiene doble membrana lipídica (Figura 1) (Bush, 2022)). Es necesario destacar para futura referencia, que la mayoría de los bacilos gram negativo como lo es esta bacteria, son resistentes a los antibióticos, ya que suele destruirlos mediante la producción de enzimas encargadas de degradarlos (Fica, 2002).
Figura 1. El Víbrio parahaemolyticus es un bacilo gram negativo, de naturaleza halófila |
Además de esto, el vibrio parahaemolyticus es una bacteria halófila (así se le conoce a los microorganismos que sobreviven en entornos con mucha cantidad de sal), es por eso que se encuentra ampliamente presente en el agua salada de mar (Brooks et al., 2011), e incluso es capaz de mantenerse en suspensión en el agua (Debanch, 2009). Debido a esto, se puede encontrar más en las zonas costeras, y sobretodo, su tasa de reproducción aumenta en climas cálidos (OMS, 2022). Además, mientras más elevada sea la temperatura del agua más se fomenta el desarrollo de este microorganismo (Debanch, 2009).
El vibrio parahaemolyticus se encuentra mayoritariamente en los pescados, crustáceos y mariscos crudos, aunque de igual manera se puede adquirir mediante la ingestión de agua salina que se encuentre contaminada (Figura 2) (Forbes et al., 2009). La enfermedad que esta bacteria puede llegar a provocar se conoce como gastroenteritis aguda. La gastroenteritis suele ocurrir cuando se ingiere pescado o marisco crudo y, desde luego, cuando no se refrigeran adecuadamente los alimentos, puesto que esto ocasiona que los microorganismos se reproduzcan a una tasa mayor y aumente la probabilidad de infección (Brooks et al., 2011).
La gastroenteritis es una enfermedad mundial, aunque tiene mayor incidencia en aquellos lugares donde se ingieren frutos del mar crudos, y se produce comúnmente por comer comida contaminada. El periodo de incubación puede durar hasta 24 horas (Brooks et al., 2011). De los síntomas mas comunes que produce son nauseas, cólicos, vómito, diarrea, dolor de cabeza y escalofríos (Brooks et al., 2011). La enfermedad normalmente dura de 3-4 días sin tratamiento, ya que como se mencionó antes el vibrio parahaemolyticus suele ser resistente a antibióticos, aunque se recomienda que el paciente tome mucha agua (Brooks et al., 2011).
La enfermedad la puede causar mas de un millón de microorganismos de vibrio (OMS, 2022). Esta suele ser leve o moderada, pero sí puede haber casos donde se requiere internar al paciente, e incluso algunos pueden llegar a la muerte (OMS, 2022). Esta enfermedad se da mas en Asia, ya que existe la costumbre de consumir alimentos crudos, es más, incluso la bacteria fue identificada por primera vez como infecciosa en Japón en la década de los años 50 debido a un brote relacionado con una lata de sardinas (Debanch, 2009).
En junio del 2020 hubo un brote de vibrio parahaemolyticus en Nueva Zelanda asociado a un conjunto de mejillones, por eso es muy importante cocinar perfectamente los mariscos (Linares, 2020). Aunque en general las personas se recuperan sin tratamiento, si puede llegar a haber casos graves, sobretodo en las personas inmunosuprimidas y/o embarazadas, es por eso que debe evitarse el consumo de estos alimentos si se tiene una de estas condiciones ya mencionadas (Debanch, 2009).
En el 2019, en Estados Unidos se llevó a cabo una investigación sobre un brote de enfermedades gastrointestinales provocado por ostras provenientes de México. Aunque no hubo ningún deceso, si se investigó que la enfermedad se dio por personas que comieron ostras crudas provenientes de Baja California Sur (Quadrado, 2019). Aquí se vuelve a resaltar la importancia de no consumir alimentos provenientes del mar crudos.
Referencias
1.- Brooks, G.; Butel, J.; Carroll, K.; Morse, S. & Mietzner, T. (2011). Microbiología Médica Jawetz, Melnick & Adelberg. (25ta ed.). Ciudad de México, México: McGraw Hill LANGE. ISBN: 9786071505033.
Comentarios
Publicar un comentario